Una vez más, inauguramos otro episodio para explicar cómo podemos utilizar los diferentes elementos de Scrum en remoto. En su día, hablamos de la Daily Scrum y del papel del Product Owner. Hoy, nos toca la Sprint Review, uno de los eventos más importantes de Scrum y que muchos equipos más pervierten. ¡Os lo explicamos!
Sprint Review como palanca de cambio
Hoy día, Scrum sigue viéndose como una quimera en muchas empresas. Ante los miles de desastres que podemos ver, pensamos que un nuevo proceso de trabajo va a revolucionar nuestra empresa y, sorpresa, Scrum no lo consigue. De hecho, el objetivo de Scrum no es cambiar tu empresa, eso es algo que debe hacer la propia empresa, Scrum permite visualizar las deficiencias de la organización para ser capaz de entregar valor.
Sin embargo, no todo está perdido, la Sprint Review es un arma que podemos utilizar para fomentar el cambio. La Sprint Review se centra en los resultados, en la generación de valor por parte del Scrum Team, y fomenta la participación de Stakeholders en los equipos. Por tanto, es una pieza clave para evolucionar de mentalidad de proyectos en fecha, a generación de valor mediante productos.
En las empresas en las que la Sprint Review existe y se potencia, se suelen dar mejores resultados que en aquellas que se obvia. El motivo es evidente: hacemos partícipe a la organización de los resultados de sus equipos y generamos foco en los resultados.

Retos de la Sprint Review
Los equipos Scrum, sobre todo aquellos cuyos miembros están a tiempo completo, se suelen acostumbrar rápido a la rutina que propone el marco. Sin embargo, a los stakeholders les cuesta más, dado que no han interiorizado aún la importancia de la Sprint Review o porque están involucrados en varias iniciativas o productos.
El primer reto es clave, conseguir que vengan Stakeholders. Por eso, el mejor consejo es convocar con tiempo y no esperar hasta el último momento. Es clave pensar muy bien la audiencia que necesitamos: a veces, siempre vienen los mismos interesados y otras veces, rotamos para gestionar expectativas. Lo ideal, y también difícil, es conseguir que vengan usuarios finales y, si no los conseguimos, personas cercanas a estos para tener el mejor feedback. También, es habitual invitar a nuestros responsables o personas de la organización impactada.
El segundo reto es conseguir la participación activa de los interesados. Muchas veces las personas acuden a la Sprint Review con ánimo de juzgar al equipo, es lo que hacemos muchas veces. Como facilitadores del evento, debemos dejar muy claro que el objetivo es inspeccionar el resultado de nuestro incremento y poder tomar decisiones (adaptarnos) para hacerlo mejor en el futuro.
En tercer lugar, la Sprint Review se completa con una adaptación, es decir, que todo lo aprendido nos lleve a acciones concretas que podamos ejecutar. Muchas de estas acciones se volcarán en nuestro Product Backlog en forma de items de trabajo.
Temas a tratar
En la última revisión de la guía Scrum, se simplificó bastante la Sprint Review. Aun así, mi consejo es repasar todos los temas que se proponían en las versiones anteriores, es decir:
- Nuevos incrementos
- Estado del producto
- Datos y métricas
- Futuro del producto: estrategia, próximos pasos…
- Mercado y números
Recordad que una Sprint Review es mucho más que una demo para asegurar que hemos cumplido con el Sprint; la clave es inspeccionar el cambio que se ha producido con los últimos incrementos que hemos creado.
Ventajas e inconvenientes de la Sprint Review en remoto
El estar en remoto nos hace repensar Scrum y plantearnos cómo utilizarlo para maximizar el valor de nuestros productos. Una gran ventaja, en el mundo actual, es que podemos acceder a interesados en la lejanía, así, hoy día es bastante habitual que haya reuniones híbridas entre lo presencial y lo digital. Esta ventaja es especialmente útil sobre todo cuando nuestra audiencia se encuentra en la distancia.
Las desventajas vienen heredadas del mundo remoto: personas que no aparecen en las reuniones, la ausencia de un cara a cara en el que comunicarnos, frialdad en las decisiones…

Consejos para hacerlo bien
La Sprint Review es una oportunidad de que personas ajenas a nuestro equipo nos guíen, por tanto, no pierdas esta oportunidad. Es clave recoger todo el feedback, por ejemplo, apuntarlo en algún documento, en tarjetas o en la herramienta que tengamos. Otra opción es crear un tablero Mural/Miró o similar y colocar zonas donde nuestros interesados puedan expresar su feedback. Por ejemplo, una zona con “mejoras”, otra zona con “ideas” y otra con “¿qué te gustó?”, de esta manera dejamos que el feedback sea autogestionado por la audiencia.
Además, es clave la “digestión” de la Sprint Review, es decir analizar todo el feedback una vez finalizado el evento. Con este ejercicio, convertimos todo el feedback en acciones y, con ello, le damos mayor valor a este evento.
Si estamos facilitando, debemos tener cuidado con que siempre hablen las mismas personas, podemos dar turno de palabra a todas durante la sesión o al finalizar para que sea más rica la visión.
Y tú, ¿cómo haces la Sprint Review en remoto?