Sin categoría

Drácula contra Capitán América, ¿Quién es tu líder?

Hablar de liderazgo es complicado, no hay una gran definición y ahora que se rehuye del concepto “jefe” se utiliza con bastante normalidad.

Aunque hay muchos tipos de liderazgo y siempre hablamos de que debe ser adaptativo a la situación, a veces un liderazgo puede ser autoritario y a veces colaborador. En Scrum y en Agile siempre se habla de líderes sirvientes, personas que por encima de liderar lo que hacen es servir, ayudar a otras personas a crecer.

Independientemente del tipo de liderazgo que apliquemos, he descubierto que hay dos tipos de líderes en función de la sensación que generan en su equipo: el líder Capitán América que dan energía al equipo y el antilíder Drácula que absorbe la energía de las personas para su propio beneficio.

Diferentes tipos de líderes

Capitán América te ilumina, te ayuda a descubrir tu propósito y te da las herramientas que necesitas (¿Esto no recuerda al manifiesto Agile?). Drácula es diferente, él te impone tareas y te dice cuando las quiere él, no aceptando un cambio de fechas. Esto baja tu motivación y Drácula entonces atacará a tu responsabilidad y profesionalidad con lo que aún caerá más tu motivación.

un líder inspira

Y hablando de motivar, un buen líder como Capitán América ayuda a descubrir en un grupo los valores que los representan. Hay una técnica de Management 3.0 en la que ponemos una lista de unos 30 valores y dejamos que cada uno elija los tres favoritos para tratar de llegar a un consenso de grupo. Por contra, un antilider Drácula lo que hará será imponer unos valores y exigir a todos que se alineen con ellos.

Capitán América busca que el grupo se exprese mientras que Drácula absorbe la sala no dejando hablar. Cuando el Drácula te ve con bajo rendimiento y te pide explicaciones (en vez de darte su apoyo) tampoco te deja hablar, permitirte hablar sería para él una manera de parecer débil, y tiene que demostrar que él es el que manda.
Capitán América da ejemplo, no solo eso, da buen ejemplo. Una amiga cuando era Scrum Master me dijo “yo me voy a mi hora… porque si me queda a echar horas ¿Qué ejemplo estoy dando?”. El Drácula es diferente, él da ejemplo echando horas fines de semana y después exige con el argumento de “yo no te pido algo que yo no hago”. Aunque él solo sea el telefonista del que realmente hace el trabajo ese día.

La resolución de conflictos te da pistas

Un líder Drácula asume que tiene el poder por lo que exige a los demás que “cambien de actitud”. Capitán América suele tener menos conflictos pero cuando ocurre no los trata desde el plano del poder sino hablando y buscando entendimiento.

Es más, si la situación se enquista Capitán América siempre lucha por resolverlo. Drácula tira por el camino sencillo, el despido. Como Drácula no empatiza con los subalternos (porque absorbe energía) le da igual la situación personal de esa persona. Que sea padre o que no pueda pagar la hipoteca para él no importa. Un caso muy curioso lo vi hace años con un líder de un área de un banco en el que me contaba que para resolver un conflicto entre personas lo que hacía era amenazar a ambas con el despido para provocar que se pusieran de acuerdo.

La transparencia cómo elemento clave de liderazgo

Capitán América comparte, es transparente y trata de no ocultar nada, es la mejor manera de llegar a las personas y de parecer creíble. Recordemos que Drácula viene de la oscuridad, la única transparencia que acepta es unidireccional para enterarse de todo lo que pasa pero no cuenta nada. No quiere que haya comunicación de su equipo hacia fuera, pero si quiere que le cuenten todo lo que ocurre.

Otra de las peores cosas que hacen los Drácula es apropiarse de ideas ajenas. Un compañero propone una idea concreta y él trata de monetizarla y explotarla cuando a lo mejor es una idea nacida sólo con el ánimo de ayudar. Lo bueno de Capitán América es que ayuda a otros a llevar a cabo sus ideas, es más, no se atribuye méritos de otros. Trata de que las ideas fluyan y de que las personas se motiven a través de ellas.

¿Cómo consigue un Drácula llegar lejos?

Pues, normalmente tienen un gran discurso, venden humo como nadie y convencen de cosas que luego ellos no ejecutan. Hace mucho que he defendido que los Agilistas debemos participar en la venta, pero siempre debe ser una venta en al que después ejecutemos. Vender algo que ejecutará otro es hacer lo de siempre, Capitán América no lo permitiría.

lider negativo es el que intimida
Además, los líderes Drácula tratan de imponer siempre su autoridad en cualquier conversación. Sacar a relucir sus galones como “soy tu jefe” o “tu tienes que ser responsable” (de lo que yo te ordeno) son sus armas. Un buen líder trata de iluminarte, no necesita usar eso porque él trata de ayudar no de imponer, de enseñar y no de ordenar, nunca tiene que decir quien es porque trata de ser invisible, nunca es el protagonista.

Por sus hechos conoceréis a los líderes

Me contaron de un ejemplo de un líder Drácula en el que el 31 de Diciembre llamó por teléfono a un Departamento para que no volvieran después de las fiestas de navidad.
Otro ejemplo de Drácula que he visto fue un jefe que decidió despedir un lacayo (así lo veía él) y para ello en vez de hablar con él o llamarlo decidió mandar un burofax y bloquear el móvil. ¿Dónde quedaron la franqueza, la confianza, el valor y la transparencia? Lo peor de este tipo de Dráculas es que por debajo de él hay personas muy buenas y profesionales cuyo talento se limita por un jefe así.

Cómo habréis visto, un líder que absorbe energía no es ningún líder, es un jefe tradicional que no ha entendido el cambio. Sin embargo, si tenéis la suerte de trabajar con un Capitán América veréis la grandísima diferencia porque os ayudarán a crecer y a ser mejores cada día. Por eso, si eres líder, piensa cómo puedes hacer para que tu equipo y tu organización sea mejor, crezca, iluminalos pero no deslumbres.

2 comentarios sobre “Drácula contra Capitán América, ¿Quién es tu líder?”

  1. IMHO el artículo polariza en exceso la definición del lider y creo que existen muchos «grises», de hecho los líderes al igual que los equipos, o los managers o cualquier otro rol de la organización, evolucionan (lo pueden hacer en ambos sentidos, sin duda) pero dejar el debate en un buenos y malos, quizás sea excesivamente simplista.

Deja un comentario